¿Quién dijo que una historia solo se cuenta?
Tendemos a pensar que las historias deben escribirse, contarse y explicarse. Sin embargo, muchas veces una historia surge simplemente de cómo observamos lo que nos rodea. La creatividad cognitiva se manifiesta precisamente ahí: en la capacidad de identificar conexiones, descubrir significados ocultos y dar sentido a lo que parece caótico o sin lógica. Se trata de dar forma a lo que ya existe, transformando la experiencia en algo más profundo. Es una creatividad silenciosa, que se activa cuando empezamos a entender y a escuchar.
En IKONO, cada sala es una invitación a la interpretación, las salas no imponen instrucciones, permiten crear nuestra propia versión de la realidad. Aquí se observa, se explora, pero sobre todo se interactúa, construyendo una narrativa que cambia con cada visitante.

Sala de camuflage: un espacio de transformación
Nuestra Camouflage Room representa perfectamente este concepto, es una sala inmersiva que oculta y revela nuevos mundos. Sus paredes miméticas absorben el cuerpo, lo disuelven entre colores y formas, hasta hacerte desaparecer. No hay referencias claras, y precisamente por eso puedes ser quien quieras.
En este espacio, la narrativa surge sin necesidad de palabras, la historia no está escrita, la creas tú. Entendiendo y conectando con el espacio y lo que te rodea, este rincón celebra la creatividad.
¡Atrévete a jugar y crear fuera de la linea!